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No hay mejor producto de belleza, que eliminar el estrés de tu vida 

No hay mejor producto de belleza, que eliminar el estrés de tu vida 

¿Mucho Estrés? Ya sea que se deba a problemas generales como la sobrecarga de trabajo constante o problemas de dinero, o de los problemas del día a día, todos podemos padecer la ansiedad persistente que inflige el estrés.

Pero lo que quizás no te des cuenta es que el estrés es el enemigo número uno de la belleza. Sin embargo, no te preocupes VAL está aquí para ayudarte a relajarte saludablemente.

Primero, ¿Qué es exactamente el estrés? Sabes cómo se siente, pero ¿qué está pasando en tu cuerpo que causa toda esa inquietud? En el nivel más básico, es un peligro inmediato que enciende el sistema nervioso simpático, que es responsable de la respuesta de lucha o huida que tienes ante un perro que gruñe o una bandeja de platos que se estrella contra el suelo en un restaurante. Durante este proceso, una serie de sustancias químicas inundan el cuerpo, incluida la epinefrina (también conocida como adrenalina) y el cortisol (la "hormona del estrés"), que a su vez aumentan la frecuencia cardíaca y los niveles de azúcar en la sangre y lo preparan para una confrontación o huida.

Este tipo básico, llamado estrés agudo, no afecta negativamente tu salud; de hecho, docenas de estudios indican que es una respuesta beneficiosa que estimula el sistema inmunológico. El estrés crónico, sin embargo, puede ser bastante dañino. Este es el sentimiento acumulativo de frustración por problemas continuos, como largas horas en un cubículo, una enfermedad persistente o tensión con tu pareja. Aquí, el sistema nervioso simpático está constantemente encendido y el cuerpo no puede descansar de los estimulantes químicos de lucha o huida. El resultado: un desgaste excesivo del cuerpo y la mente, así como consecuencias para tu apariencia. El estrés es "la raíz de todos los males de hoy, al menos en lo que respecta a la salud y la belleza".

Cabello y piel agrietados:
El estrés tiene repercusiones en el cabello y la piel, que no se pueden superar con una pizca de acondicionador o un poco de crema.

El efluvio telógeno, un trastorno del cuero cabelludo que detiene el crecimiento del cabello y provoca un aumento en la caída del cabello, es provocado por eventos estresantes física o emocionalmente, como el parto, una enfermedad crónica o una cirugía. La caída del cabello a menudo ocurre meses después del evento, lo que dificulta la identificación de una causa directa. El estrés también puede empeorar la caída del cabello debido a la alopecia, un trastorno autoinmune en el que el sistema inmunológico ataca los folículos pilosos, por lo general dejando parches redondos de calvicie en la cabeza o el cuerpo.

El estrés estropea la piel en un grado aún mayor, atacando en múltiples frentes. Esto no es ninguna sorpresa. La piel tiene la superficie más grande de todos los órganos del cuerpo humano, está repleta de nervios y vasos sanguíneos y está conectada directamente con el cerebro.

El acné es una de las dolencias cutáneas más comunes inducidas por el estrés. Si bien la conexión entre el estrés y el acné puede parecer obvia para cualquiera que haya estallado durante una semana difícil, la evidencia fue en su mayoría anecdótica hasta hace aproximadamente una década.

En 2002, los dermatólogos investigadores de la Universidad de Stanford mostraron por primera vez una correlación directa entre los brotes y el estrés en los adultos. Unos años más tarde, en uno de los estudios sobre el acné más grandes hasta la fecha, los investigadores del Wake Forest Baptist Medical Center mostraron un aumento del acné durante el estrés, específicamente granos rojos e inflamados. La correlación no significa causalidad, por supuesto, pero desde entonces, los experimentos de Christos Zouboulis, M.D. del Centro Médico Dessau en Alemania han demostrado un vínculo fisiológico entre las hormonas relacionadas con el estrés y el acné. "Durante muchos años, pensamos que existía un vínculo entre el estrés y el acné, pero la ciencia no ofreció la respuesta", dice Zouboulis. "Pero ahora nuestros experimentos muestran que es probable".

Resulta que el estrés es parcialmente el culpable de varios otros problemas comunes de la piel, desde brotes de virus hasta arrugas. Los investigadores lo han relacionado con erupciones de virus del herpes previamente inactivos, incluido el herpes simple que causa el herpes labial, mayor actividad de trastornos inflamatorios de la piel como eccema y psoriasis, y curación prolongada de heridas tanto en el cuerpo como en la boca (estudios de Ohio State University muestra un aumento del 24 por ciento y del 40 por ciento en el tiempo de curación de las heridas en los brazos y la boca, respectivamente). La hormona del estrés, el cortisol, descompone el colágeno, una proteína de la piel que ayuda a mantenerla fuerte y elástica. Menos colágeno significa más arrugas. Wechsler señala que el estrés puede envejecerlo y hacer que parezca de tres a seis años mayor.

 

Duerme bien, come bien, suplementate bien y relájate:
El estrés afecta directamente la cantidad y la calidad del sueño, lo que a su vez puede aumentar tus niveles de estrés durante el día, dice Eric Powell Ph.D., Director del Centro e Investigación del Insomnio del Clayton Sleep Institute en St. Louis. Su equipo de investigación ha descubierto que, si bien la cantidad de sueño que dormimos cada noche es importante, igualmente importante es la consistencia del sueño, cuando te acuestas y cuando te levantas, así como la calidad. La pérdida de incluso unas pocas horas por noche puede aumentar la respuesta inflamatoria del cuerpo, lo que aumenta el riesgo de padecer una letanía de enfermedades. También puede aumentar los niveles de la hormona grelina, que estimula el hambre, lo que podría provocar sobrealimentación y obesidad.

Entonces, un objetivo importante para combatir el estrés es dormir constantemente. Pero, ¿qué puedes hacer con toda esta otra información? No puedes evitar el estrés, pero sus manifestaciones físicas, ya sea que incluyan pérdida de cabello, brotes o dientes desgastados, son señales de advertencia. Y, más allá de la belleza y la salud mental, el estrés está relacionado con enfermedades crónicas como la diabetes, las enfermedades cardíacas y la hipertensión, que dan un incentivo aún mayor para controlarlo.

Algunas ideas para aliviar el estrés en tu vida incluyen técnicas de relajación como la meditación, el tai chi o el yoga, o la terapia de modificación del comportamiento, que pueden enseñarte nuevas formas de lidiar con tus desencadenantes personales del estrés.

Otras opciones saludables que reducen el estrés reflejan las cosas básicas que los médicos recomiendan para el bienestar general: Puedes tomar pasos muy pequeños y muy simples todos los días: Dormir bien, mover tu cuerpo, comer sanamente y suplementarte con Magnesio, Omega 3 entre otras excelentes opciones para manejar el estrés y vencerlo.

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