Sabías que los arándanos son buenos para la salud intestinal y son una fuente natural de prebióticos?

Los arándanos son una excelente fuente de muchos nutrientes. Son una buena fuente de vitamina C, vitamina A, vitamina E y vitamina K1. Además, contienen manganeso y cobre. Muchos no se dan cuenta de que necesitamos cobre en nuestras dietas para mantener la salud del corazón, y las dietas occidentales suelen ser demasiado bajas en cobre, por lo que los arándanos pueden ser una excelente manera de aumentar la ingesta de cobre. Lo que hace que los arándanos sean aún más sorprendentes es que son casi incomparables en términos de sus propiedades antioxidantes.

Arándanos y salud intestinal

La maravilla del arándano va aún más lejos. En un estudio de 2017 publicado en Applied and Environmental Microbiology, el microbiólogo nutricional David Sela y sus colegas informaron la primera evidencia de que ciertas bacterias intestinales beneficiosas pueden crecer cuando se les alimenta con un carbohidrato que se encuentra en los arándanos. Estas bacterias intestinales alimentadas con arándanos también exhibieron un metabolismo especial y atípico que produjo mucho menos ácido láctico de lo esperado.

Se descubrió que los azúcares especiales que se encuentran en los arándanos, los xiloglucanos, no son digeribles por el estómago. Entonces, cuando comemos arándanos, esos xiloglucanos pasan por nuestros estómagos y llegan a nuestros intestinos, donde las bacterias intestinales beneficiosas pueden descomponerlos en moléculas y compuestos útiles. ¿Qué significa esto? En pocas palabras, ¡los arándanos son una fuente natural de prebióticos!